Padre Ignacio María Doñoro
“ El amor es la única cosa que crece cuando se comparte”
Ignacio María Doñoro nació en Bilbao en 1964 y fue ordenado sacerdote en 1989. Pero, tras siete años en la orden decidió unirse como capellán a las Fuerzas Armadas. Fue en ese momento en que la historia del “Páter Ignacio” comenzó, cuando su vocación religiosa se convirtió también en dar dar asistencia espiritual y anímica a quienes, como él y muchos, entregan su vida para servir a los demás: los militares.
Después de misiones en Bosnia, Kosovo y El Salvador es destinado de regreso a España a la Comandancia de la Guardia Civil de Inchaurrondo en julio de 2001, donde sirvió varios años.

En su etapa de capellán durante una misión en Bosnia.

Padre Ignacio atendiendo a niños tetrapléjicos en Kosovo.

La Guardia Civil fue su familia durante casi 10 años.


Sin embargo, durante una de sus misiones a El Salvador su camino volvió a dar un giro: en su afán por salvar a un niño, mintió. Tras hacerse pasar por traficante de órganos lo compró por 25 dólares. A partir de ese instante supo que el rumbo de su destino en realidad lo estaba llevando por otro lado, junto a los más vulnerables, los más pobres entre los pobres.
Fundó una ONG para salvar niños en riesgo de extrema pobreza, abrió casas de rescate en Colombia, Tánger y Mozambique. Pero, fue en la selva peruana donde decidió dejarlo todo y con sus ahorros crear en 2011 el primer Hogar Nazaret.
FUNDADOR DEL HOGAR NAZARET
La primera casa de Hogar Nazaret abrió en Madre de Dios (Perú), en medio de la selva amazónica, una región castigada por la minería ilegal, lo que provoca una situación social complicada y extrema, con un sistema familiar casi inexistente y en donde abundan los casos de niños desamparados.
Nuestra misión es devolver a esos niños y niñas sus derechos arrebatados:
- El derecho a la identidad: muchos no cuentan con documento de identidad, ni figuran en ningún tipo de registro
- El derecho a la vida y el desarrollo: la mayoría llegan en estado de desnutrición.
- El derecho a una vida libre de violencia: un gran número ha recibido malos tratos en su entorno familiar.
- El derecho a un sano desarrollo integral, tanto físico como psicológico.
- El derecho a la intimidad, en especial el de las niñas y adolescentes.
“Cada niño es único es irrepetible y le devolvemos la dignidad y el derecho a vivir una infancia segura y feliz”




Rodeado de algunos niños y niñas del Hogar Nazaret, el Padre nos cuenta directamente la maravillosa labor de esta obra.
Un apoyo especial a las niñas y adolescentes
Nuestro proyecto Casas Nuestra Señora del Rocío en Bellavista tiene como propósito atender de manera especial a casi 100 niñas y adolescentes, todas ellas con vivencias de especial vulnerabilidad por motivos de brechas en la educación. Normalmente han sido obligadas a dejar sus estudios para asumir responsabilidades domésticas, han sido expuestas a violencia y sometidas a la explotación sexual.
En el Hogar Nazaret encuentran una vida nueva, un entorno seguro y la posibilidad de estudiar y formarse hasta llegar a la universidad.
Conoce algunos testimonios de nuestras niñas:

Josy

Keyko

Kátherin
Libros que te llegarán al corazón
En sus libros, el Padre Ignacio nos acerca a la realidad de los niños y niñas del Hogar Nazaret en Perú. A través de ellos no solo conocerás más acerca de este maravilloso proyecto, sino que además ayudarás a mejorarlo. ¡Cada granito cuenta!
“No pude decir que no a Dios. Aquellos que estáis enamorados sabéis que el amor te atrapa y acorrala. No deja opción. Hacer locuras por amor es lo que da sentido a una vida. Y veo al Amor en los más pobres. Reconozco su rostro en medio del sufrimiento, en las puertas del infierno, rescatando niños abandonados.”
Padre Ignacio María Doñoro